El príncipe de los oradores latinos fue
Cicerón, cuyas brillantes palabras han perdurado a través de los tiempos. Cicerón se dedicó a la política en la cual descolló por sus hermosas piezas oratorias. Mereció el título de "Principe de la elocuencia"
Cicerón descubrió una conspiración contra el gobierno y denunció, en un candente discurso, a Catilina como autor de este hecho. Pasado esto suceso, fue nombrado "Padre de la Patria".
Aquellos acontecimientos le acarrearon enemistades a Cicerón y fue desterrado Algún tiempo más tarde volvió a Roma y fue recibido con honores desenterrando antiguos rencores. Los miembros del
Triunvirato conformado por Octavio, Marco Antonio y Lépido se habían ofrecido a hacer el sacrificio en señal de lealtad al Triunvirato. Marco Antonio, a petición de su esposa Fufvía.que tantas ofensas había recibido de Cicerón, solicitó la cabeza de éste y Octavio cometió la cobardía de entregársela Cicerón fue capturado, degollado al instan
te y su lengua cercenada para luego ser clavada en la puerta del Senado como señal de advertencia para los furibundos oradores que no tuviesen el buen juicio de saber con quién meterse.